Una guía para enfoques basados en el vecindario para la justicia alimenticia

En 2014, Local Initiatives Support Corporation (LISC) NYC lanzó una nueva iniciativa de justicia alimenticia en toda la ciudad llamada Comunidades Para Alimentos Saludables NYC, con un enfoque de desarrollar programas dentro de cuatro organizaciones de desarrollo comunitario basadas en vecindarios – New Settlement Apartments, Northeast Brooklyn Housing Development Corporation (NEBHDCo), Cypress Hills Local Development Corporation y West Harlem Group Assistance (WHGA). Cuatro años después, LISC NYC ha lanzado una guía que analiza en profundidad cómo se creó la iniciativa, cuales estrategias se están implementando y las mejores prácticas que han surgido a partir de las experiencias de los cuatro sitios originales hasta el momento. Esta guía puede ser de beneficio para las organizaciones comunitarias, patrocinadores y evaluadores interesados ​​en liderar y apoyar iniciativas para mejorar el acceso a alimentos saludables en comunidades de bajos ingresos.

¡Vea y descargue Communities for Healthy Food: The Toolkit aquí!

Junto con la guía, LISC también lanzó un estudio de caso de 6 páginas de Acción Comunitaria de Alimentación en New Settlement que destaca nuestro trabajo, nuestra comunidad y nuestras lecciones aprendidas. ¡Eche un vistazo, es posible que vea algunos nombres y caras familiares!

En el evento Community Partnerships and Health Equity de LISC NYC el 18 de abril, la directora del programa Acción Comunitaria de Alimentación Taisy Conk y la miembra de FoodCorps July Alcantara se sentaron en un panel sobre Comunidades Para Alimentos Saludables y la guía, aprovechando la oportunidad de senalar nuestro trabajo escolar. En las preguntas y respuestas posteriores al panel, cuando un asistente preguntó cómo la iniciativa Comunidades Para Alimentos Saludables puede contribuir al cambio a nivel de sistema, Taisy ofreció la respuesta de que los programas basados en los  vecindarios como el nuestro pueden modelar un enfoque de justicia alimentaria que responde a la comunidad, con la esperanza de que otras organizaciones con fuertes raíces en sus comunidades puedan hacer lo mismo y aprovechar sus fortalezas. De esta forma, «el cambio de políticas y sistemas puede ser menos de proceso descendente, más receptivo a comunidades individuales y más impactante… este es un paso hacia la creación de un nuevo paradigma más allá del sistema alimentario capitalista».

¡Gracias a LISC NYC por su continua colaboración en este trabajo!